Antes de terminar…

… unos brindis…

… vamos a brindar por los que se sacaron el carnet de conducir, por los que se compraron su primer coche, por los que hicieron su primer viaje largo y llegaron bien.

Vamos a brindar por los que ganaron un Fich-Man, o dos, con un corto que rompió moldes y cambió la perspectiva del cine histórico (y si no lo hizo fue porque la industria cinematográfica aún no está preparada para asumir ese cambio)

  

Brindemos también por los que encontraron su primer trabajo, hicieron sus primeras prácticas o firmaron su primer contrato “como Dios manda”. Porque no es fácil... Brindemos por los que encontraron en los compañeros de su primera experiencia laboral un gran grupo humano.

Vamos a brindar además por esos viajes hacia la capital espiritual de este año 2010, Santiago de Compostela. Por esos cafés y esas comidas de reencuentro con personas especiales que compartieron algo no hace mucho y que siguen siendo importantes (un abrazo, M.)

Os invito a brindar también por todos esos blogs que han nacido este año; por la Música para desenchufar, por los Retazos, por los Looming Lemings y especialmente por nuestros amigos de Badalona, el Bressol Verd-i-Negre.

No nos olvidemos de todos aquellos que quisieron afrontar el reto de alcanzar la meta compostelana para abrazar a Santiago, nuestro patrón. Por todos los que salieron una mañana de julio para disfrutar de unos días entre amigos. Por todos los que depositaron en el Apóstol sus esperanzas para sus vidas y las de los suyos. Brindemos por todos los que llegaron a Santiago y por los que se quedaron a mitad de camino. Y brindemos por todos los momentos que el Camino de Santiago ha regalado a todos aquellos que se decidieron a realizarlo (un abrazo a los de Vallecas, a los extremeños, y muy especialmente a los Walkmen)

Además, vamos a brindar por los que este año se licenciaron, que no fueron pocos. Por todos los que creyeron que no sería posible y al final resultó que lo era. Brindemos por todos los que encuentran dudas en la difícil senda académica, por los que aspiran a culminar sus estudios en 2011 y por los que aspiran a dar un empujón a sus carreras en el próximo año.

Brindemos por los amaneceres frente a Punta Pestaña (¡que no decaiga, oh!) y por los que volvieron a ver el horizonte granate y rojizo de los amaneceres sobre el Mar Mediterráneo. Os invito a brindar por todos aquellos momentos que desearíais que nunca terminaran.

Brindemos por todo lo que este año nos ha deparado, un 2010 inolvidable en muchos aspectos para mí. Estiremos el brazo y choquemos nuestras copas por nosotros y los que tenemos a nuestro alrededor, para que la fuerza de nuestros vidrios al chocar se transmita a todos aquellos que hoy no encuentran un motivo para sonreír o seguir adelante.

Brindemos por los éxitos, si los hubo, y por los fracasos, para superarlos. Por las buenas noticias, para celebrarlas, y por las malas, para seguir adelante. Por el encuentro, para saborearlo y aprovecharlo, y por las despedidas, a veces tan dolorosas, para asumirlas.

Y finalmente, bebamos por todos aquellos que se han marchado. Para que el sabor del último trago del año nos traiga el buen recuerdo de quienes, desde allí donde estén, nos cuidan con toda su atención.

A todos vosotros, sin más dilación, desearos una noche muy feliz para empezar con ilusiones el 2011. Ningún año es fácil y un comienzo de década menos aún. Muchísimo ánimo para todos.

¡¡¡Feliz año 2011!!!